divendres, 16 d’abril del 2010

(In)Justicia, por un puñado de votos...

Perdonad si peco de tópico, pero pensando en la Gürtel a uno se le viene a la cabeza el far west de los spaguetti westerns, en el que las melodías de Sergio Leone decoraban un escenario chusco de gente corrupta en el que en todas partes te llamaban "forastero". Sí, ése lugar donde los justos mueren ahorcados y los tiránicos corruptos siguen haciendo de las suyas, yéndose de rositas sin apenas problemas. Pero para aquellos que no sean fans de las primeras pelis de Clint Eastwood y crean que se hará justicia... ya sabéis lo que cantaban Los Panchos: "lo dudo, lo dudo, lo duuuuudoooo...". Sí amigos, pq por mucho que a los rojos izquierdosos como yo nos pese (y como dicen las encuestas que encontrais en este mismo blog), los amigos que crearon la Gürtel no se verán excesivamente afectados por ello en las elecciones, pq Zapatero las perderá y el PP volverá al Gobierno. Nustrusenyó ens agafi confessats. Pero aunque sea por una vez, que no nos venza el pesimismo, aún quedan cerca de 700 días para las Generales, y eso en política es un mundo. Un mundo muy pequeño, enfermo y previsible, pero un mundo.

Aún podemos disfrutar de las elecciones británicas, de las del Barça y las catalanas. En cuanto a las primeras, me ha alegrado mucho leer hoy que el debate a tres bandas ha salido con ganador inesperado, el liberal Clegg. Este fue el primer debate televisado en el Reino Unido, lo que dio más morbo al encuentro. Pero igual que los celebrados en España, el debate fue, por lo que dicen las crónicas, encorsetado, lento y aburrido, pero sirvió para que el que menos contaba diese un paso adelante y se presentase como una alternativa real. Todavía faltan dos debates más, pero hay una cara nueva en la política de las islas. Lo que no consigue la tele, no lo consigue nadie... que se lo pregunten a Belén Esteban.


Otro hecho que no deja de sorprenderme es la facilidad con la que las cosas dan la vuelta en la vida. Recuerdo leer "1984", fantástico libro de George Orwell y tristemente popular por el programa Gran Hermano, donde los Ministerios tenían el nombre invertido. El ministerio de la Paz era en realidad el guerra (aquí pasa lo mismo con Defensa), el del Amor era el encargado del castigo y la tortura o el Verdad era el de la manipulación y destrucción de documentos que ocultaban lo que quería la clase dominante (curioso paralelismo con la realidad actual, donde aquellos que siempre exigen "seguir buscando, investigar más, que se sepa la verdad" lo que quieren en realidad es que se encuentre cualquier chorrada que concuerde con lo que ellos estipulan, para manipular la verdad y dejarla a su gusto, léase el PP con el 11-M). Decía que tengo la impresión de que el mundo sigue al revés, como en el libro de Orwell, cuando veo a un juez juzgado por los delincuentes a los que ha intentado encarcelar. Los de la Gürtel y los falangistas juzgando a Garzón, en lugar del magistrado juzgando a corruptos y acólitos de Franco. No digo que Garzón lo haya hecho todo bien, pero realmente es indignante y de nuevo 1984 me viene a la cabeza, cuando veo que el primer hombre juzgado en una causa sobre el Franquismo sea precisamente el juez Garzón. Da que pensar. Sobretodo si los de la acusación son los fascistas de "Manos Limpias" (de nuevo, un nombre invertido). Hay algo que apesta en la Justicia (injusticia diría Orwell) de este país.

Y finalmente, el Estatut. Sí amigos, nuestro querido Estatut. Otra vez, paralizado en el Tribunal Constitucional. Me aburre este tema, sinceramente me aburre hablar de este tribunal, mayoritariamente lleno de jueces incapaces, politizados y ultraderechistas, de un Gobierno del PSOE que no sabe, no quiere o no tiene webos de presionarlo para que se solucione el tema de una puta vez, de una oposición rabiosa y pataletera. O de unos políticos y una sociedad catalanas que somos incapaces de decir "HASTA AQUÍ", de hacer un frente común y comenzar a ser un lobby de verdad, no los acobardados que hemos sido siempre. Por mucho que diga o exija Montilla, al PSC no le interesa revelarse por ser filial del PSOE, a CiU, que ya se ve ganadora de las autonómicas, tampoco. Porque ¿para qué ensuciarse las manos cuando volverás al Govern en unos meses? Por eso un frente común es imposible, por eso Catalunya está como está y por eso hay tanta gente descontenta, pq nuestros dirigentes son incapaces de ponerlos encima de la mesa y decir "ahora os vais a enterar".

Pero un puñado de votos han sido siempre más importantes que la vieja Catalunya. Así ha sido y así seguirá siendo. Por eso este jinete triste se marcha en su caballo hacia el horizonte. Lleva su poncho, su sombrero y un cigarro y su mirada está perdida en el infinito. Se pregunta, pensando en todo este asunto, quien debe ser el bueno, quien el feo y quien el malo. Un futuro incierto le espera y en su cabeza lo único que escucha es la melodía de una vieja película, resonando en su mente como un lejano silbido...

dilluns, 12 d’abril del 2010

... Barça, Barça, Baaaarça!!

Esta semana no empezaré hablando de la crisis, de la trama Gürtel, de las excusas del PP, del juicio a Garzón o del sorprendente y "ansiado por muchos" regreso de Cascos a la política (el cual, creedme, merece y tendrá un post en este entretenido blog). Hoy quiero recordar y recrearme, como buen barcelonista, en el partido de Barça en el Bernabéu, donde se venció por 0-2 al estrelladamente galáctico Real Madrid. Antes de eso me gustaría recordar un gag de Juan Carlos Ortega del pasado viernes que, en La Ventana de la Cadena SER, avanzó el resultado del partido de forma más cachonda que profética. Nota aclaratoria: en el link de la ventana encontrareis la 3ª hora del programa del viernes, entera. Si avanzais hasta la mitad del programa podreis escuchar la broma de Ortega.

Hablando ya del partido, creo que pocas veces he disfrutado tanto un Madrid - Barça como el de este fin de semana. No por sus consecuencias (otra vez líderes, golpe moral al rival, media liga en el bolsillo...) sino por cómo la viví. A mi padre y a mí nos acompañaron en tan bonito evento mi hermano Iñaki y su mujer Robyn, quienes estaban de paso antes de volver a Sudáfrica, y Kike y María José (Marijoseeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee... broma interna) , una pareja encantadora, amigos de la universidad con los que paso grandes momentos aquí en la capital. Fue una velada agradable, cenando los seis unos buenos macarrones, ensalada y pa amb tomáquet (Pantumaca, como dicen aquí) con jamón y salchichón del bueno. Pude disfrutar de un partido que fue normalito, pero con victoria en casa del máximo rival, con buenos amigos, con la familia. Fue una noche para recordar. Ojalá tengamos más así pronto.


divendres, 2 d’abril del 2010

Obama: Yes, We Did It

Evangelio previo de San Ricardu
Nunca he creído en el destino, en el hecho de que nuestras vidas estén escritas, predestinadas. Tampoco creo que haya un Dios superior que hable a una Iglesia para que nos marque el camino, porque ellos hace tiempo que no Le escuchan. Creo en la gente, en su esfuerzo para superar día a día. Creo que las oportunidades se las crea uno mismo, creo en aquellos que siguen un objetivo, que lo persiguen, que no paran hasta llegar a su meta. Y creo en quienes ayudan a esa persona, a esas personas, a conseguirlo. Creo en aquellos con ideales, los que inspiran a otros a tomar un camino adecuado para sus vidas. Creo en gente positiva, en los que no se detienen antes de empezar, en los que luchan cada día por ser felices. Creo en los que unen. Creo en gente inspiradora como un hombre de mirada tranquila, esperanzada, de piel oscura y que salió del anonimato (que no de la pobreza) para llegar a presidir el país más rico del mundo.
Admiración sin contención
Para un doctorando en Comunicación Política, estudiar la campaña electoral de Obama es un placer enriquecedor. Un afroamericano, un negro como decimos aquí, en la casa blanca es todo un hito digno de estudiar. No es sólo un fantástico intérprete de discursos con Telepromter, es también un hombre que escribió varios libros en los inicios de su carrera y con un árbol genealógico digno de un maestro de laberintos. Obama, por encima de todo, es un luchador incansable que ha conseguido objetivo tras objetivo, que ha llegado a una meta, y a otra y a otra y a otra y que seguirá corriendo sin descanso hacia la siguiente. Y lo hará llenando las portadas de los periódicos de todo el mundo. No es que no haya cometido errores, ni que sus metas se cumplan al 100%, pero si consigues un objetivo, la gente no recordará del todo los detalles. Conseguir una reforma sanitaria, un seguro de salud para 30 millones de habitantes de tu país, algo en lo que han fracasado 7 presidentes anteriores, es algo demasiado grande para perderse en lo que se dejó en el camino. Los políticos de Estados Unidos tenían una cuenta pendiente con la sanidad que Barack Obama a comenzado a saldar. Queda camino, pero se ha dado un primer y gran paso.
Creo que debería seguir centrándose en arreglar su país, que los Bush dejaron hecho unos zorros, y olvidarse del exterior por un tiempo. Pelear por la instauración de las energías renovables en lugar de buscar más petróleo, sacar de una vez las tropas de Irak y, como dijo Josep Ramoneda en la tertulia de 'Hora 25' de la Cadena Ser, "ser reformista o no ser", porque ése es el camino que inició y que debería seguir. Para seguir ilusionando, como en la siempre emotiva 'Yes, we can', que se basó en el inspirador discurso tras las primarias de New Hampshire. Afortunadamente, Obama no solo provoca devoción religiosa en los asistentes a sus mítines, admiración incontenida en muchos periodistas o inspiración y confianza en los que no creían en los políticos, sinó que también nos ha proporcionado un poco de humor con la 'Obama girl' o con una divertida parodia contra McCain, el video del 'No, you can't'.
Aquí, otra cosa...
Ojalá los políticos de nuestro país tuvieran la misma voluntad de cambiar de rumbo. Se han anquilosado en un método en el que no se ponen de acuerdo ni en una forma de salir de la crisis (no sea que salgamos de verdad y nuestro rival gobierne por entonces). Zapatero hace mucho que demostró no estar a la altura, que le llegó la presidencia demasiado pronto y que le interesan más las encuestas que las medidas que toma. Es un hombre de anuncios precipitados, que confía poco en sus propios ministros, que no sabe vender bien sus logros, los cuales no son por cierto pocos ni irrelevantes. Aunque comenzó con el mismo espíritu que años más tarde ha recogido Obama y tuvo con una buena primera legislatura, con la crisis se torció y la segunda legislatura está siendo pésima. Aún así, ha tenido suerte con la Gürtel y el 'caso Matas' azotando al tambaleante PP de Rajoy, pero no ha sabido aprovechar la ocasión para tumbarle.
Rajoy, en cambio, es un ejemplo de la persistencia de una derecha que por muchas leches que le den, no acaba de caerse nunca porque sus votantes son fieles y poco críticos, porque prefieren "malo del PP conocido que un buen rojo del PSOE" (aunque ahora mismo no hay mucho bueno en el PSOE). Rajoy no es un lider, no sabe o no quiere dar un paso al frente para tomar las riendas de su partido y, como dibuja Peridis en sus viñetas, se dedica a tumbarse a la bartola, esperando que la crisis acabe con ZP. En Catalunya, Montilla ha apostado por regenerar su partido (ya tocaba) y hacer una campaña catalana menos agresiva que las anteriores. La mano dura de José Zaragoza se notaba y quiere dar un aire nuevo. Es una buena jugada, mejor hacerlo ahora, antes de las elecciones, que tras la debacle de perder el Govern, cuando su opinión ya no contaría para nada. Esperemos que de esta regeneración aparezca un lider que, cuando Mas acabe su primer mandato tras tres intentos, pueda hacerle frente en condiciones. Esperaremos pacientemente y estaremos allí para opinar sobre lo que ocurra. Sobre Laporta, mejor no hablar...

Volveré...

... a pisar las calles de esta ciudad que es mi hogar y donde tan a gusto me encuentro. Donde mis amigos siguen. Donde viven, crecen, se reproducen y afortunadamente, no mueren. Volveré a ver los partidos del Barça en el Butyclan (mítico bar de espantoso nombre), a comer tapistas holandesas y beber Absolut&ZumoDeNaranja en el Amsterdam, a jugar al futbolín o a dardos en el Bobby's y a volver a casa con unas copas de más. Volveré a tomar un café con un amigo en la calle Balmes, una sidra en el Irlandés de la plaza Castella, un cacaolat en una granja de las Ramblas o una cocacola en cualquier bar de la ciudad, con mis amigos. Volveré a sonreir paseando por las calles que he recorrido 1.000 veces y que espero recorrer un millón de veces más. Volveré a Plaza Catalunya, a la Estació de Sants, a Vallcarca, a subir el Passeig de Gràcia, Gran de Gràcia, Lesseps y República Argentina en el 22, el mítico 22.

Volveré a ver a mi gente, les volveré a encontrar casi iguales que hace 10-15 años (algún kilo más, con menos pelo, más tranquilos pero menos sonrientes) y seguiré sintiendome extraño sin saber qué contarles. Les hablaré mi trabajo, del doctorado, de mi vida en Aranjuez, de mis gatas, de ser del Barça en Madrid... Y por dentro seguiré sintiendo que me he alejado un poco de ellos, demasiado, que siguieron con su vida, sus novi@s, sus maridos y mujeres, sus hijos, sus carreras... seguiré recordando que cada vez que vuelvo he perdido el contacto con alguien, con un buen amigo, y que a pesar de tener más de 300 en Facebook, apenas sé nada de ellos... y aún así, la tristeza o la melancolía no me vencen, porque sé que un día, contento, orgulloso y feliz... ¡Volveré!