dimecres, 29 de setembre del 2010

Juerga General

Han pasado muchas cosas en las últimas dos semanas. Desde el inicio del juicio del Caso Malaya o las medidas "anti-gitanos" de Sarkozy, hasta el fallecimiento de un mítico de la política, la música y la poesía como José Antonio Labordeta. Del primer tema sólo diré que es pronto para opinar, pero parece obvio que algo apestaba en Marbella, así como en muchos otros ayuntamientos y que espero que este sea sólo el primer caso. De las medidas racistas de Sarkozy debo decir que me apena mucho la nula reacción del resto de jefes de Estado europeos y del escaso castigo que van a tener las medidas por parte de la Comisión Europea. Una vez más, la burocracia del viejo continente se queda a medio gas o dicho de otro modo, se acojona. Una acción de este calibre merecía un expediente al gobierno francés, por racista, pero por lo visto se quedará en un triste tecnicismo. Ese "enough is enough" de la comisaria europea de Justicia, Derechos Fundamentales y Ciudadanía, Viviane Reading, ha quedado en agua de borrajas. Me lo temía. Me hubiese extrañado mucho un expediente a un país fuerte como Francia. De Labordeta, sólo diré que no le seguí mucho, siempre me pareció un personaje muy auténtico en su forma de ser y un referente para la izquierda, la de verdad, la que cree en sus convicciones y no acaba vendiéndose a las encuestas. De la que ya no queda, vamos. Un saludo, allí donde estés...

Por otra parte, Huelga General. O Juerga General, como decían los M-Clan. Una huelga que se ha quedado en ni pa tí ni pa mí. Ha sido bastante seguida en algunos sectores, pero no ha tenido la incidencia que se espera de un acto como este. Los sindicatos han demostrado que aún pueden liarla (aunque no tanto como querrían) y los políticos (el 90% de ellos) han demostrado que no estaban de acuerdo con la huelga. Lo que significa que están de acuerdo con las medidas tomadas por el Gobierno, que van totalmente en contra de los trabajadores. Es decir, para los políticos, si las medidas les benefician (al PSOE para mejorar la imagen internacional de España, al PP para desgastar al Gobierno y al resto de minoritarios para hacerse oír), si les benefician decía, que se jodan los trabajadores y que pierdan los derechos.

Tras lo dicho, debaría decir por coherencia que estoy a favor de la Huelga General celebrada el 29 de septiembre. Pero teniendo en cuenta que yo trabajé ese 29 de septiembre, para no perder dinero y para que en mi empresa no me mirasen mal, ¿como qué me deja eso? ¿como un esquirol? ¿como un hipócrita? ¿como un capitalista? No lo sé. Quizá la solución sería prohibir que te descuenten el día de trabajo cuando vas a la huelga, pq de hecho es un derecho fundamental. De hecho muchos empresarios estaban de acuerdo con la huelga, puesto que les supone un ahorro en sueldos, en energía, en agua... que no tendrían de otro modo. La patronal a favor de la huelga, paradójico el mundo en el que vivimos...

dijous, 16 de setembre del 2010

La seriedad por delante de todo

Hace casi un año que empecé este blog (cómo pasa el tiempo) y aún no he cumplido una promesa que os hice en el primer post. Excepto "El Ala Oeste de la Casa Blanca", de la que comenté un par de cosas en mis primeros comentarios, poco os he hablado de uno de mis principales entretenimientos, las series. Parece que en los últimos años el cine y las series de televisión americanas son como vasos comunicantes. Cuando baja la calidad del cine, sube la de las series. En los últimos cinco (incluso los últimos 10) años, se ha visto claramente como la ficción para televisión americana han superado en calidad a las películas (cada vez más previsibles). La existencia de cadenas por cable (es decir, no dirigidas a grandes públicos) como la HBO ha supuesto que los guiones puedan ser mucho más incómodos, irrespetuosos y políticamente incorrectos (gran invento, lo de recuperar "lo políticamente incorrecto", por cierto).

En los 90 acabamos un poco hartos de ver series de humor con moralina como "Padres forzosos", "Primos lejanos" (con el mítico Balky Bartocomus), "Cosas de casa" (y su inseparable Urkel) o incluso, con tanta repetición, nos aburrimos del irreverente "Príncipe de Bel Air". Luego nos sorprendió agradablemente cuando llegaron los Simpsons y alucinamos con el vocabulario de los cuatro críos de "South Park", cuyos herederos, los "Padre de Familia", "El Show de Cleveland" o "Padre Made in USA", no se quedan atrás. Pero dibujos animados aparte, en los últimos tiempos hemos visto series de muchísima calidad como "Studio 60" (desgraciadamente, de una sola temporada), Los Soprano, "The Wire (Bajo escucha)" o "The Shield (al margen de la ley)" (que en Catalunya se tituló con el nombre de su protagonista, "Vic Mackey"). Estas tres últimas series son de lo mejor de los últimos 10 años en series policiacas y recomiendo encarecidamente verlas en este orden: Los Soprano (6 temporadas, 86 capítulos), The Wire (5 temporadas, 60 capítulos) y finalmente The Shield (7 temporadas, 88 capítulos). Leído así suena a atracón, pero es un atracón de calidad.

- Los Soprano es para muchos la mejor serie jamás rodada, que trata sobre la mafia de New Jersey y de cómo su protagonista, Tony Soprano pasa a ser su Cappo, y como va desquiciándose día a día, crimen a crimen. Las relaciones que mantiene con su familia (su esposa, sus hijos), su psicóloga y su otra familia (la mafia) son clave en la serie, además de cómo van creciendo, evolucionando (y en algunos casos, muriendo) año a año todos los personajes.

- The Wire es una serie que trata de cómo un equipo de policías planean capturar a las bandas que venden droga en Baltimore y las dificultades que se encuentran por las rutinas profesionales, los jefes cabrones, las presiones políticas... pero lo realmente bueno es que también te muestran el otro lado, el de los delincuentes, su realidad personal y social, lo cual da a esta serie grandísimas dosis de realismo, no como la escasa que encontramos en otras como CSI. A medida que avanzan las temporadas entran en juego temas como los sindicatos, las rivalidades entre bandas de delincuentes, las ambiciones de los políticos emergentes o los perjuicios laborales que provocan algunas rutinas periodísticas. Una gran serie, sin duda.

- La última de la lista es "The Shield", que es conceptualmente muy similar a Los Soprano, pero desde el otro lado. Esta serie describe las locuras que un policía corrupto y su equipo de asalto pueden provocar en una un barrio ficticio de Los Angeles llamado Farmington, con altas dosis de delincuencia, drogaadicción y conflictos sociales entre blancos, negros e hispanos. Allí, Vic Mackey es el rey hasta que su nuevo capitán, Acebeda, llega con ganas de ascender rápidamente a costa de este poli tan corrupto. También cargada de dosis realidad, como The Wire, muy interesante y con un personaje muy carismático como protagonista, igual que ocurre en "Los Soprano" con Tony Soprano. En fin, espero que os gusten, porque todos y cada uno de los 234 capítulos que he recomendado hoy (256 si contáis tb los 22 de "Studio 60") valen realmente la pena.

dissabte, 11 de setembre del 2010

Feliç Diada


Avui només vull desitjar a tots i totes que passeu un gran dia. Sigueu feliços en aquesta Diada Nacional i Visca Catalunya.

dilluns, 6 de setembre del 2010

Al fin hay sarao en el PSM

Es curioso lo mucho que se habla últimamente del PSM. Sí, ese partido olvidado y casi ninguneado de la capital del reino, la llamada sección madrileña del PSOE. Es curioso, comento, que de un partido regional con tantos afiliados, teóricamente el segundo tras el PP en la capital, se hable tan poco tanto en medios afines como en los rivales. Es curioso digo, porque este debería ser el que formara la cantera del partido padre y en cambio lo único que consigue es ser una lacra en el camino sus mayores. Hay quien dice, con bastante mala leche, que el PSM son las sobras de la sede socialista de Ferraz. Es decir, a los malos, tontos o marginados de Ferraz les toca ir al PSM, a labrarse un futuro poco prometedor. También hay quien bromea diciendo que el PSM es una entelequia, una quimera inexistente, que el PSOE ha alquilado unas oficinas y unos operarios mueven maniquíes con ruedas frente a las ventanas para que parezca que allí trabaja alguien, como veíamos en un viejo comic de Tintín.

Pero no, se ve que el PSM existe. Lo hemos descubierto, como no, gracias a la televisión, que siempre nos ilumina con su inagotable sabiduría. Entre programas de calidad como "La noria" y "Donde estás corazón (para los entendidos, DEC)", hemos descubierto que en los informativos televisivos hablan mucho últimamente de un partido (el PSM) que creíamos tan real como el coche volador de "Regreso al futuro" (el mítico Delorean). El líder de los socialistas madrileños, Tomás Gómez, se ha querido presentar a las elecciones contra Esperanza Aguirre, pero al parecer Zapatero tenía otros planes. Leyó en una encuesta que Trinidad Jimenez, su ministra de Sanidad, tenía bastantes más opciones que Gómez y ello le llevó a sugerir que igual era mejor que no se presentase. Pero como suele decirse "ui lo que m'ha disho!" y Tomasín cogió las armas y se dispuso a hacer unas primarias normales (es decir, donde varios compiten) en lugar de claudicar obedientemente y dejar que el líder escoja apuntando con el dedo (estilo PP). Sorprendente lo mucho que ha cambiado ZP en los últimos años, aderechándose a la fuerza y hasta con gusto. Preocupante...

Tomás Gómez y Trinidad Jiménez, candidatos a enfrentarse a Esperanza Aguirre por la Comunidad de Madrid.

El caso es que si algo bueno se puede sacar del asunto es que al menos la democracia del partido sube, igual que la imagen de Tomás Gómez, que de incompetente (por su pésima gestión del PSM) y olvidado (por no aparecer en TeleMadrid ni por casualidad), pasa a víctima ("que me quieren echar!!") y, cuando pierda contra "la Trini", mártir. Y él lo sabe, y está jugando precisamente estas cartas, para irse con la cabeza bien alta y, quien sabe, algún carguito en Ferraz en el bolsillo. Lo triste del tema es que este país aún necesita unas cuantas clases magistrales en cuanto a democracia interna de los partidos. Y eso seguirá pasando hasta que no se deje de ver a las primarias como un incordio, en lugar de como un paso imprescindible.

Dicho lo cual, al menos en el PSOE hay primarias. Yo optaría por cambiar la ley electoral (no solo por esto) para obligar a todos los partidos a convocarlas para escoger a sus dirigentes. Veríamos entonces si el "holgazán de la hamaca y el puro" (como definía Alfonso Guerra a Rajoy) empezaba a mover el culo o no.