dimarts, 27 de setembre del 2011

Intento de violación

¿Está la independencia informativa de TVE en peligro?
El pasado sábado tuve el placer de compartir tertulia en el programa 'Ágora Pulp' de ÁgoraSol Radio con la escritora Almudena Grandes y con el periodista Enrique Rioboo (os dejo aquí el link, por si queréis escucharla) para hablar sobre el intento de los partidos políticos de controlar el contenido informativo de RTVE (en muchos medios se informó del tema, como la propia web de RTVE o 233grados.com). Fue una tertulia amena en la que todos los contertulios estuvimos de acuerdo en lo peligroso y preocupante de todo el asunto. Preocupante porque, a pesar de que se echaron atrás, demostraron que las formas ya poco les importan. Si a dos meses de unas elecciones se atreven a intentar controlar de forma alevosa la información de la cadena de televisión más influyente de nuestro país, ¿qué no harán tras el 20N? Si, como parece, el PP gana las elecciones con mayoría absoluta, ¿qué le va a impedir volver a intentarlo? Posiblemente nada. De esa forma, cuando lo vuelvan a intentar (y posiblemente lo consigan), tendrán la oportunidad de convertir TVE en Telemadrid y tener una plataforma propagandística sin rivales relevantes a nivel de prestigio informativo. 

También me ha parecido muy preocupante que el PSOE se abstuviera en la propuesta presentada por el PP. Y es realmente preocupante porque de haber votado en contra, la polémica propuesta no hubiera salido adelante, por lo que la silenciosa complicidad socialista en este tema es más que obvia. Parecen darle de nuevo la razón al 15M cuando les acusan de ser "la misma mierda", como dijo en una ocasión Felipe González, de ser el PPSOE, de ser lo mismo. No me preocupa tanto que CiU votara a favor de la medida ni que los representantes de ERC y de CC.OO. se abstuvieran (dejando a UGT e IU como únicos votos negativos), puesto que el seguidismo político por intereses particulares de todos estos partidos (con el PP el primero y con PSOE los segundos) es otra obviedad. Pero repito, la silenciosa complicidad PP-PSOE es un hecho no nuevo, pero sí escandaloso, en el que se pretendía quitar a este ente una independencia  que, reconozcámoslo, no ha conseguido nunca del todo, pero en la que se estaban tomando pasos esperanzadores en los últimos tiempos gracias a la iniciativa del Gobierno Zapatero (eso sí, en eso hay que darle todo el mérito). Posiblemente, como se comentó en la tertulia, la independencia del ente ya no interesa al PSOE post-ZP (y jamás ha interesado al Partido Popular). 

Estos son los miembros del Consejo de Administración de TVE que intentaron 
atacar la independencia informativa del ente (clicad la imagen para aumentar). 
Si analizamos la forma en la que se ha dado marcha atrás en esta violación del derecho a la información independiente de TVE, los violadores han argumentado que el hecho en sí fue un error, es decir, que el 90% de los votantes del consejo de Administración de TVE tuvieron un momento de tontuna, proponiendo unos la medida y absteniéndose otros estratégicamente para que saliera adelante, así como si nada, porque les dio un ataque de gota repentino, una pájara sin sentido o simplemente porque estuvieron algo despistados y se equivocaron al votar.  Ante tal planteamiento, la respuesta de una persona cabal y con dos dedos de frente  debería ser: "JAJAJAJAJAJA" o "¡¡ALIGUAL!!" o el ya clásico "¡QUE TE PIRES!". En la política, y también en la vida, las palabras tienen una gran importancia, por lo que calificar de ERROR lo que fue una calculada CONSPIRACIÓN política me parece una desfachatez más, sobretodo porque la teoría del error no se la cree nadie. Nadie que no sea un talibán de alguno de los partidos, quiero decir. 

En fin, al menos en esta ocasión las redes sociales han desbaratado el intento (que no fue el primero, ni posiblemente será el último) de controlar la información de los servicios informativos de RTVE. Bendito seas Twitter, que nos informas y entretienes, y cuyos usuarios ridiculizan las iniciativas 2.0 de los partidos políticos, como el #preguntaleaMariano o el #RubalcabaSi. Esperemos que no pase nunca de moda.

dissabte, 3 de setembre del 2011

Un país distinto

Es posible que este post debería de haber sido escrito hace una o dos semanas, pero quise esperar que los acontecimientos tomaran un poco de forma para no precipitarme. La primera impresión que me llevé fue de asombro. No acaba de creérmelo. Creí, equivocadamente, que era una ocurrencia, un titular para conseguir desviar la atención sobre otros asuntos o, simplemente, un brindis al sol. Pero al parecer no, ayer se consumó el atentado de los mercados más fuerte sobre nuestra democracia. Y ese atentado, fue ejecutado por un hombre al que he votado en dos ocasiones y que ha defraudado a su país, a la ciudadanía y que ha acabado con las mínimas posibilidades que su partido tenía de ganar las elecciones. En el futuro, se va a recordar a Zapatero como el hombre que consiguió para el PP la mayoría absoluta que tanto anhelan. Tras una buena primera legislatura, ha conseguido llevar a niveles históricos la capacidad para hacer mal las cosas en la segunda. 

Sarkozy, Zapatero y Merkel, responsables directos del "reformazo".

El hecho de reformar la Constitución no es algo trágico en sí, muchos hemos pedido muchas veces que se reformara para mejorar la proporcionalidad parlamentaria, o para que el Senado sea una cámara útil y representativa, en lugar de un gasto inútil de dinero. A todos nos hubiera gustado que se hubieran abordado estos cambios más pronto que tarde, pero que el único cambio constitucional haya sido el de neoliberalizar nuestro Estado porque los mercados lo exigen ha sido una jugada que nadie esperaba. Una vez más, Zapatero ha sorprendido a todos, esta vez bajándose los pantalones ante Merkel y Sarkozy, y pidíendoles que embistieran a gusto "que a mí en la política me quedan cuatro días". Y poniéndo él mismo la baselina (disculpas por lo gráfico de la metáfora). Pero lo malo es que los embestidos vamos a ser nosotros, la ciudadanía, en lugar de los políticos que la han pertrechado. El PP ha obtenido una victoria inesperada y acogida con los brazos abiertos, en la que se grava en la piedra constitucional una medida claramente neoliberal (por mucho que desde el PSOE nos quieran vender la burra de que no hay políticas económicas de izquierdas o de derechas). Pero lo peor de todo no es el cambio que se ha hecho en la Constitución (el contenido), sino las razones por las que se ha hecho, las formas en las que se ha vendido nuestro país a los mercados, sin darnos opción alguna a la participación. 

Los ciudadanos han vuelto a salir a la calle para protestar contra la 
reforma constitucional y por no poder votar en un referéndum.
Lo que la gente lleva meses reclamando, lo que ha llevado a que aparezcan movimientos como el 15M es precisamente esta forma de hacer política, en la que dos se lo guisan y se lo comen, en el que se han perdido las formas y en que se actúa de espaldas a la ciudadanía. Sí amigos, nosotros, los llamados PPSOE, decidimos cambiar la constitución sin preguntar nada a nadie, sin que nadie tenga derecho a negarse, no sea que nuestros planes no salgan adelante y los mercados se enfaden con nosotros por no hacer TODAS Y CADA UNA de las chorradas que nos piden. A todo eso, con la constitución cambiada, la prima de riesgo sigue por encima de los 300 puntos, y eso que llevamos ya algunas decenas de medidas tomadas a su favor y en contra del de los ciudadanos. Precisamente eso es lo que lleva a la ciudadanía a perder el apoyo de los políticos, lo que lleva a muchos ciudadanos a indignarse y salir a la calle, para encima ser golpeados y aporreados por la policía que los políticos dirigen (pésimamente, por cierto). Una vez más, y como comenta Ignacio Ramonet en esta entrevista, los políticos españoles, con sus actos, le están dando la razón al 15M. El viernes 2 de septiembre, Juanjo Millás decía en "La Ventana" de Gemma Nierga que se había ido de vacaciones en un país y había vuelto en otro. Tristemente estamos de acuerdo, vivimos ya en otro país. Uno distinto, peor y menos democrático.